La imagen actual es una “ escultura de bulto redondo, de vestir, articulada, de un metro de altura, realizada en madera y policromada al temple”.
Fue confeccionada en los talleres Roldán de Sevilla hacia 1940, sustituyendo a la anterior imagen que había sido destruida en 1936.
En 1992 fue restaurada por el equipo de la Universidad de Granada, actuando como mecenas y mediadores Dº Antonio Pérez Pineda y su esposa Dña. Gloria Caballero Clemente.
Más tarde se volvió a restaurar en Córdoba en el año 2006 por el Imaginero D. Enrique Ruiz Flores.
Es seguro que esta imagen no era la primitiva pues ya en el siglo XVI existía la ermita, la cofradía y por consiguiente una imagen.
-La devoción y el culto:
Siempre ha sido grande la devoción a Nuestra Señora de la Estrella. El origen se pierde en la noche de los tiempos. Ya en el siglo XVI existía la ermita y las jambas de la puerta, donde se han encontrado fechas de 1569 y otra quizás de 1506 y también algunas peticiones para pedir algún favor.
A partir de 1607 tenemos documentación en el archivo municipal que nos habla de la traida de la Virgen el 25 de abril de cada año y la llevada a su ermita el último domingo de septiembre.
También son numerosas las veces que la Virgen es traida a la población, incluso llevada a Villanueva del Rey, para impetrar algún beneficio principalmente en caso de sequía o lluvias abundantes.
Como ejemplo de esta devoción hay que mencionar los numerosos exvotos que colgaban en las paredes de la ermita.
Hoy se reducen a algunas muletas, figuras de ceras y unas tablas pintadas del siglo XIX con la misma temática ( lecho del enfermo, en una esquina de la parte superior la Virgen y la lectura dando las gracias por el bien recibido).
Destacar que en la actualidad esta devoción hacia Nuestra Patrona queda latente a través de los billetes que es costumbre colgar en su manto, sobre todo el día de la Romería.
-La ermita:
Aparece por primera vez en la documentación de 1551.
Tiene en su interior cinco arcos ojivales de ladrillo, para terminar en una bóveda circular en el altar mayor, donde se pueden apreciar unos frescos que representan a Dios Creador y en los laterales los cuatro evangelistas. En la parte izquierda de la nave hay un púlpito de ladrillo blaqueado.
En el exterior aspecto típico de ermita rural “El pórtico de entrada y las construcciones añadidas a los costados para el albergue de la cofradía y de los romeros originan tejados de enormes faldones achaparrados de los que emerge la blanca espadaña, a los pies, y la caja de la capilla mayor a la cabecera, constituyendo una de las estampas más típicas de la geografía serrana”.
La entrada del templo es un arco ojival de ancha arquivolta trasdosada por moldura.
Este edificio fue dañado en 1936 y restaurado por el Ayuntamiento y Cofradía poco a poco, quedando en 1951 terminada la restauración. Ultimamente se ha remodelado, estando actualmente en muy buenas condiciones.
-El paje de la Virgen:
El paje de la Virgen, San Sebastián, una imagen de unos 65 centímetros de altura es de madera, aunque solo se encuentra tallada la cabeza y las manos. Está vestida como los nobles de la época de Carlos III. Casaca de terciopelo encarnado, chaleco con gola de encaje blanco, calzón de punto hasta la rodilla, también de veladillo como el chaleco y la casaca, medias blancas y zapatos con hebillas.
Existe una anecdota de principios de siglo en la que en una visita pastoral del Obispo de Córdoba Fray Ceferino González, a Espiel, al ver al “paje” junto a la Virgen preguntó que quien era el personaje que ocupaba un puesto junto a la Patrona. Se le contestó que era San Sebastián, el paje de la Virgen. Entonces el Obispo dijo que sería Don Sebastián y prohibió darle culto, pero, a la muerte del prelado, volvió a recuperar el puesto que le habían otorgado siempre los espeleños, “velar por su Virgen”.
Junto con la Virgen de Estrella, Espiel también cuenta con un patrón, San Sebastián, cuya festividad se celebra el día 20 de enero.
Antiguamente existía una Cofradía de San Sebastián, pero desapareció. Y actualmente para no perder la tradición, la Cofradía de la Virgen de Estrella se encarga de sacarlo en procesión por las calles de nuestra localidad la tarde de su festividad.
Destacar que el día anterior, 19 de enero, es tradición antiquísima en nuestro pueblo ir por la tarde a los alrededores a recoger tomillos, que se traen en haces y que al anochecer son quemados en los “candelorios”que se hacen en las distintas calles del pueblo.
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